miércoles, 29 de octubre de 2008

Te invito a desayunar...






Por finnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnn, por finnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnn tengo mi cocina terminada. Llevo sin cocinar en ella desde el 30 del mes pasado. Pero ya se terminaron las calamidades :-). Ahora haré platos ricos para conquistar por el paladar a mi chico. Jajajaja estos días solo tenía un arma de conquista, y era en la cama. Uyyyyyyyyyyy que anticuada eres Isa, seguro diréis algunos/as :-). Se dice en la cama por que sale así. Pero la cama puede ser un sofá, el suelo, el pasillo :-), el baño, en una silla, y ahora por fin en la cocina. En la terraza no, pues los vecinos podrían vernos, y además, ahora se quedaría con el frío el pajarito chiquitín :-).

¡¡¡Pero bueno!!! Si yo venía hoy a hablar de mi cocina. Por mi casa han pasado 6 hombres. Ummmmmmmmmmmmmmm bueno estos son trabajadores y muy respetuosos, una en su morada se hace respetar. Los albañiles: Paco y Miguel. Paco es un empresario autónomo, jovencito de de 33 años, con esposa y dos niños pequños, además es un albañil muy trabajador. Currante como su pequeña cuadrilla. Ningún problema con ellos. Jamás tuve que decirles que aquí no se fuma :-) y sí en la calle o en el descansillo de la escalera. Miguel es uno de sus peones. Jajaja, nació el mismo día que yo y el mismo año. El Nació en Rumanía yo en España. Tiene el pelo blanco y su boca desdentada. Tiene aquí un hijo y una hija en su país. Ella estudia en la universidad para ser una buena Arquitecta. La tocó un padre maravilloso a esta joven rumana. Él la envía parte de su mensualidad para que saque su carrera y pueda vivir como cualquier persona.




Jesús es el dueño de una tienda de muebles. Sí, sí, de donde yo encargué estos muebles. Él está soltero y comprometido. Sé, que va cada día a un gimnasio y poco más sé de él.

El montador de la cocina no sé cómo se llama. Y hemos compartido aquí el primer día desde las 13:30 hasta las 23:45. Sólo sé que trabaja mucho porque él se ha montado toda la cocina. Sé que no tiene próstata, y sé que no bebe líquidos mientras trabaja. :-) Chico joven y con aparato urinario en condiciones. Ayer entró por segunda vez en mi cocina para hacer los últimos remates, a las 12:00 y se fue a las 17:35. Tampoco bebió, no comió nada y no hizo pipi:-). Es una mina este joven. Yo como siempre hago con las personas que vienen a trabajar a casa, le ofrecí pero él dice que no. La verdad es un joven fibroso. Y su paquete está bien dotado jajajajaja. No es que se lo palpara no, dios me libre, pero una tiene ojos y ve los volúmenes aun.

Al poco de irse el Joven montador de la cocina, llegó el fontanero. El hombre venía con mucho desparpajo y con sus herramientas ruidosas. Soltó su maletín y se puso a sacar sus herramientas.
- ¡¡¡ oiga por favor, que aun no he estrenado yo los muebles, no me los estrene usted!!! - le dije al buen hombre.
- Señora que no es para tanto, solo es el ruido de las herramientas, -me decía tan tranquilo.
- No de usted esos golpes al soltarla que jod... el armario :-)
Mutis, no dijo nada.
Estaba sudoroso. ¡¡¡ "si es que las grasas no son buenas para subir cargado hasta el 4º piso y sin ascensor jajajaja, pensé yo para mis adentros".

El buen hombre tuvo que bajar al coche a por una llave. jajajaja, mientras bajaba le escuché como relataba.
al rato, sube, y sube con un cigarro en la boca.
- No aquí dentro no se puede fumar... - le digo en ese momento.
- Señora ya me ha llamado usted la atención dos veces, - me dijo.
- Pues esperemos que no se la tenga que llamar una tercera -, le dije. Jajajajaja y yo riéndome por dentro.
Termina de poner el grifo y me dice:
- Puedo pasar al wáter?
- Si como no pase hombre, pase, pase, le indiqué...

Aquí me di cuenta que un joven aguanta sin hacer pis casi 11 horas, y el fontanero que tendría como 59 años, su próstata, ya estaba algo inflamada.

Y claro, rápido fui limpiar las gotitas que suelen dejar algunos hombres en la taza del wáter, jajajajaja soy así de tiquismiquis. Mi hombre no deja ninguna gotita, que quede muy claro, él se la sacude muy bien pero sentado en la taza. No hace pipi de pie. Y a mí esto me gusta, puedo ir yo de tras, sin hacer la prueba del algodón para quitar sus gotitas vertidas en la taza. No hay cosa que más rabia me de, que mojarme mi culillo de pipi cuando me siento en el wáter. Claro que sólo me siento en mi wáter y en el de la familia y amigos que sé que están limpios :-)


Bueno el hombre hizo su trabajo, y dijo en media hora más palabras que el joven montador de la cocina.

Y he aquí las aventuras y desventuras de mis obras