miércoles, 28 de julio de 2010

¿Eres Mariposa o Gusano en Capullo de Seda?


La misma mariposa que la de abajo  pero diferente color.
Distintos minutos, distintos pensamientos, distinto estado de sentimientos, distinto carácter,...
Así somos los humanos, seres cambiantes.
Podemos estar eufóricos y de repente pasar al llanto. Podemos ser todo dulzura, y de pronto amargos como la hiel.
Podemos ser personas abiertas, extrovertidas y de repente ser introvertidos, cerrarnos como un cepo cuando ha conseguido a su víctima. Ser víctima de los sentimientos te forja una cárcel de hierro. El hierro da sensación de irrompible, de dureza, sin embargo se quiebra con un golpe seco. El hierro es material dúctil al igual que lo somos los humanos, somos manejables y manejamos.
Aunque nos volvamos duros como el hierro, alguien hará de nosotros alambres sensibles.
O por el contrario puedes ser un alambre sensible y los que te manejan volverte un boque de hierro.
Vaya trabalenguas he formado en un momento.




Seguro alguno de ustedes que me lee, dirá que estoy chalada, que no sé de qué hablo. Es posible que así sea. Pero yo todo lo que escribo, está relacionado de alguna manera, con mi estado mental y emocional. Con las cosas que me suceden o sucedieron en algún momento de mi vida.

Algunas mentes son frías y calculadoras.
Pueden hacer mucho daño a los demás y así mismos.
Nosotros somos quienes de alguna manera enfermamos nuestro cuerpo. Igual que podemos enfermarlo teniendo una mente devastadora, podemos curarlo teniendo una mente positiva.
No hay enfermedades, si no enfermos.
Me explico, no es lo mismo un cáncer en una persona positiva, que un cáncer en una persona negativa que todo lo ve negro.
La persona positiva, seguro sale antes de su enfermedad. La persona negativa, al estar más tiempo en oscuridad, tardará más en curarse, o tal vez no se cure nunca.

Nuestras defensas, son la mejor de las armas para combatir todo tipo de enfermedades. Si las defensas bajan, es igual que un campo de batalla cuando más de la mitad de sus soldados han sido dados de baja. Si el otro campo de batalla o los contrarios con los que se lucha tiene más soldados activos, será el que gane la guerra, o la batalla de ese día. Pues esto mismo pasa con las enfermedades. Cuanto más defensa tengamos, cuando mejor esté nuestro sistema inmunológico (soldados) saldremos antes de cualquier enfermedad. Si hay depresión bajan las defensas del cuerpo (baja de soldados heridos). Si hay autoestima, suben las defensas (soldados sanos en campo de batalla)

Y no sé porque he escrito esto. Ahhhhhhhhh sí, que no es bueno estar pensando en si fulanita me ha tomado el pelo, si menganita me ha hecho eso y no me ha gustado. Las cosas pasan y hay que solucionarlas, y continuar con la vida. No marear la perdiz, que quiere decir no dar tantas vueltas a la cabeza de si podríamos habernos dado cuenta tal cosa. Las cosas suceden y a seguir luchando y enfrentando el día a día.

Una mente despejada, es igual que un comienzo de día. De la oscuridad, pasamos a la penumbra y después a un bello amanecer. Así tiene que estar siempre nuestra mente. Libre de ataduras como las mariposas, que van de flor en flor, aprovechando lo maravilloso que se va cruzando en su camino. Nuestro tiempo de vida es como el de las mariposas, pasa rápido, por eso hay que aprovecharlo y tener una mente abierta y despierta.



No hay comentarios: