... es incompresible que dentro de la desgracia aun haya más desgracias.
¿Como es posible que en Haití con todo lo que ha sucedido, aun haya hombres con ganas de violar a las mujeres?
¿Dónde está el respeto, la piedad del ser humano?
Es monstruoso que a la desgracia se le añada más desgracia aun.
La pena es que los violadores no fueron aplastados bajo los escombros.
Parece que Dios aun sigue de vacaciones y se olvidó de organizar parte del mundo. Mientras montones de mujeres son violentadas, él sigue sin hacer lo más mínimo.
Si yo fuera Dios, Dejaría impotentes a todos los violadores.
Paralizaría las manos de los maltratadores y asesinos.
Haría un mundo más justo.
Repartiría los bienes.
No cabrían las injusticias en el mundo.
Pero yo no soy Dios y no puedo hacer nada de eso, a lo sumo solo puedo denunciar para que el mundo se entere y los poderosos hagan justicia.
Pincha aquí: Violencia_Sexual_en_Haiti.pdf
firma aquí:Firma contra la violencia-sexual-haiti/